Enseñando: Recordando nombres
Un nombre es importante para todos. Aprendiendo los nombres de cada estudiante es crucial en ser un líder efectivo.
I No se de lo que se trata con los trabajadores de jóvenes, pero parece ser que la mayoría de nosotros tenemos problemas en recordar nombres. No hay nada peor que ver el estudiante por la tercera vez y pensar, “¿qué es su nombre?” Espero que no sea el único que usa palabras como “chavo”, “hombre” y “dude” cuando estoy hablando con alguien con el cual ya debería conocer su nombre. Y lo peor es cuando ese joven sabe que no recuerdas su nombre. Te hace la pregunta, “¿qué es mi nombre,” y lo hace con una sonrisita. Tropiezas, tartamudeas y admites que te das por vencido.
¿Qué ocurriría si recordaras cada nombre cada vez?
Yo no soy bueno con los nombres, sin embargo, aquí hay algunas cosas que me ayudaron en los años pasados que tal vez le podrían ayudarle a usted. Trate de usar estas ideas cuando está conociendo a un estudiante y no quiere olvidar su nombre.
1. Repetición
Cuando un estudiante se introduce, trato de decir su nombre lo más que pueda después de la introducción inicial. Después de oír su nombre, digo “Es un placer conocerte, (nombre del estudiante).” Luego cuando estamos hablando, lo repito de nuevo. “Juegas deportes (nombre)?” Cuando termino, lo digo de nuevo, “¡Que gusto conocerte, (nombre) nos vemos después!” Es sencillo y no importa si el o ella sabe lo que está haciendo. Lo que importa es que ellos van a saber que son importantes para usted.
2. Tome fotos
Cuando tienen visitantes, tome su foto. He visto que las fotos de Polaroid pueden ser tarjetas de atendencia. Cuando entra el estudiante, ellos agarran la foto, escriben sus nombres y lo meten a una canasta y puede ser una manera de atendencia. Eso si funciona. Lo que bueno durante la semana es cuando está en su oficina o en s hogar, puede ver las fotos y asegúrese de que memorice esos nombres.
3. Asociación de nombres
¿Tiene el mismo nombre de alguien que usted conoce muy bien? ¿Se parece un poco a una celebridad? ¿Tiene un interés en algo con lo que puede hacer la conexión con el nombre? Si hace esos tipos de asociación, es más probable que pueda recordar un nombre.
4. Haga preguntas
Si estoy hablando con un estudiante y no recuerdo su nombre, a veces le pregunto como lo escribe. Muchos nombres tienen diferentes maneras de escribirlo y eso no sería una pregunta rara. (Si es un nombre como Mateo, David o Felipe, entonces va a verse chistoso pero es más común de que tengan diferentes maneras de escribirlo) Tomás/Thomás, Nora/Norah, Rene/Reneé, Rebecca/Rebeca/Rebeka, Susanna/Susana, etc.
5. Solo una vez
Creo que la mayoría de los estudiantes le van a perdonar una vez si no recuerda sus nombres. Ellos saben que tiene que conocer tantas personas. No van a ser malos con usted si se olvidó. Si sabe que ya los ha conocido, solo pídele que le digan su nombre de nuevo. Si está haciendo esto la tercera o cuarta vez, tal vez lo van a tomar más personalmente. Pero la mayoría del tiempo verá que una vez está bien.
6. Invítales a que le ayuden
Si está en una iglesia más grande, tal vez necesite que algunos estudiantes le ayuden. Si son nuevos, hágales saber que usted quiere conocerlos mejor y parte de la manera de hacer eso es por ayudarle. Cuando tiene interacción con los estudiantes, invítales a compartir sus nombres con usted. Cuando ya lo sepa, puede sorprenderle con llamarle su nombre.
Un nombre es importante. Aprendiendo sus nombres es crucial en la eficacia de guiarles. Aunque es recordar el nombre de un visitante o solo memorizar todos los nombres de los estudiantes en un ministerio grande, espero que estas seis ideas le a sido de ayuda en conocer su rebaño.